Las Leyes
Le Ley de la Causa y el Efecto
“De lo que siembres de eso recogerás la cosecha”
Una frase que encierra el sentido de la existencia humana, el significado del ser encarnado, una frase que se aplica a todo nuestro actuar, a todo cuanto hagamos o dejemos de hacer.
Si se siembra se recoge y si además se siembra el bien, se recogerá el bien, pero si se siembra el mal, se recogerá el mal; observemos que es una consecuencia de una acción que se cumple, y por lo tanto es una ley: la ley de la causa (sembrar) y el efecto (recoger). Tengo que sembrar para luego cosechar, más temprano o más tarde, pero siempre después de sembrar.
Debido a esta ley es que estamos en este plano tridimensional, encarnados. Entonces nos preguntamos: ¿Qué somos? ¿De dónde venimos? ¿Para dónde vamos? ¿Por qué tanto dolor y sufrimiento en la Tierra? ¿Qué hay después de aquí? ¿Por qué a mí? … En la búsqueda de estas respuestas nos encontramos con conceptos distintos y más profundos acerca de Dios, del Universo, de los hombres, de los espíritus y de las demás leyes que rigen la existencia del ser encarnado y su entorno.
La ley de la causa y el efecto es una ley de justicia, pues señala que todo lo que se haga se tiene que pagar, y de ahí que todo lo que nos sucede es por que lo merecemos. En conciencia, si estamos cosechando, es por que hemos sembrado; pero resulta, que lo que recogemos no corresponde a lo que nos acordamos que hemos sembrado, ni para merecer el premio que hemos logrado, ni para sufrir las dificultades que tenemos que enfrentar. Entonces ¿Qué ha pasado? ¿En qué momento sembré que no me acuerdo? ¿Qué explicación tiene todo esto?
Si al ser humano se le enseñara que está encarnado por que se halla pagando los desaciertos del ayer, de existencias anteriores; que si asesina, será asesinado; si roba, será robado; si daña, será dañado; si secuestra, será secuestrado; si masacra, será masacrado; en fin … que si en la existencia actual no tiene el tiempo o la oportunidad de cancelar, tiene que regresar las veces que sea necesario para saldar las cuentas pendientes; que todas esas cuentas son capas oscuras de otras existencias que se han estado cargando a través de las reencarnaciones, hasta que se cambie de actitud y empiece a quitarse esas capas, por que la ley es muy clara y dice: “Limpio te fuiste de mi lado y limpio volverás hacia mi”.
Si se supiera que nada se queda impune, que la Ley de la Justicia se manifiesta a través de la Ley de la Reencarnación, por que fue con una materia que se encausó y será con una materia que tendrá que pagarse esa causa; que como una existencia en materia es relativamente corta y la lista de las causas es tan larga, tendrá que entrar en una cadena de reencarnaciones, hasta que se haga merecedor de encontrar el camino hacia la luz y con ello romper esa cadena, para encaminarse por el sendero de la luz del retorno, el retorno hacia el origen, el retorno hacia nuestro Creador.
Fuente: http://www.artedinamico.com