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Puntos de transición para la evolución

Hoy el Hombre no ha entendido todavía su transición y su proceso evolutivo y como en su caminar va encontrando la forma de evolucionar, no entiende aún como los seres humanos debemos fusionarnos con los mundos superiores donde viven los espíritus más evolucionados y que quieren ayudar a la humanidad en dicha transición.

 

Esta fusión hoy no es tan rigurosa y no necesita de grandes disciplinas como en el ayer, ya que se encuentra en cualquier trabajo que hagamos por el bien de la humanidad en cumplimiento de una misión, que a cada uno le fue asignada antes de nacer.

 

El trabajo del hombre en cumplimiento de su misión debe ser un trabajo con una intención firme, y entregado ese servicio a Dios, para que Él lo integren su plan Divino y al identificarnos con nuestro Creador, esta devoción permanente disuelve todo obstáculo para la unión con los seres más elevados.

 

La mente analítica en muchas ocasiones no nos permite ver con claridad el servicio que debemos prestar a la humanidad, por eso este servicio le llega a cada cual según su evolución lo importante es no ponerle trabas al llamado que Dios nos hace a través del grupo al cual pertenezcamos o a nuestra familia o simplemente aquel que nos necesita, todas estas experiencias son muy bellas porque le permiten al hombre su elevación y la unión que tanto necesitamos para crecer espiritualmente, pero también debemos saber que existen pruebas que nos dan la fortaleza que necesitamos para seguir adelante, por eso la ley del silencio es muy valiosa en nuestro proceso interno.

 

Si aplicamos en nuestra vida el orden, la disciplina y el silencio, llegamos más fácilmente a la unión con leyes superiores, entregadas por seres superiores que nos ayudan a dar el salto a la nuestra evolución.

 

Anteriormente no era develado para dónde íbamos, de donde veníamos, ni tampoco que pasaba con nuestros esfuerzos en nuestra vida espiritual no material, pero cuando de nuestro interior nace la entrega, llega la claridad y sabemos qué hacemos parte de un todo y que todo lo que nos ocurre será para mejorar.

 

La fatiga el cansancio en nuestra vida la da nuestro trabajo material, nuestros egos y nuestra resistencia al cambio y al desapego por las cosas que creemos son muy importantes, pero el trabajo  nos olvidamos que cuando la muerte llega a nosotros, todo el sufrimiento por lo material y las cosas que logramos conseguir en la tierra en ella se quedan, por eso se dice “ Si tu corazón ofreces a Dios, Dios te lo recibirá, pero si lo ofreces a la tierra, ella se lo comerá y el espíritu en la tierra quedará; de lo siembres de eso recogerás la cosecha.”, además toda la fatiga, preocupaciones, pensamientos negativos afecta el ánimo, la salud y el equilibro del hombre en la tierra.

 

La mayoría de las enfermedades de nosotros se dan por deudas espirituales y por tener el pensamiento disperso y la concentración de la mente solo en lo material, es hora ya de concentrarnos en el trabajo espiritual, ese cuando se coge con amor, ni cansa ni nos enferma por duro que parezca, canalizando las energías al plan evolutivo, este trabajo abrirá la mente a la intuición para tener contacto con los mundos superiores y los maestros más avanzados que nos llevarán de retorno a Dios.

 

ADAPTADO POR OCTAVA GENERACION

BIBLIOGRAFIA.

AURORA, esencia cósmica curativa, TRIGUERINHO

http://www.fiuxy.net/ebooks-gratis/1107211-trigueirino-libros-en-espanol.html